10 agosto 2006

Lecturas inaplazables

El verme inmerso, años ha, en la terrible pero fascinante historia que cuenta Ernesto Sábato en El Túnel me movió a continuar con la lectura de más libros suyos. Sin embargo, por razones tal vez misteriosas, tal vez por simple y pura vagancia ante la idea de enfrentarme a la edición en dos volúmenes (cortesía de El Mundo) que tengo de Sobre héroes y tumbas (la obra de Sábato que siempre quise leer), jamás logré pasar de la página 50, y eso que hice tres o cuatro intentos. Ahora, en el quinto, espero alcanzar el definitivo.
Semejantes circunstancias, con otros añadidos, rodean la inexplicable relación que mantengo con La Peste de Albert Camus, aunque debo precisar en este caso que la última tentativa por engancharme con la novela del existencialista Albert me sorprendió en medio de una encrucijada más inaplazable y existencialista quizás, mi destierro voluntario a Sebastopol.
Para finalizar, añadir una obra también muy clásica ante la que realizo mi primera intentona: ni más ni menos que El Gran Gatsby, de Francis Scott Fitzgerald.


Lecturas frescas
Todo eso que cito en los párrafos anteriores no significa que me haya pasado el tiempo sin tocar un libro, sino que, a falta de otros entretenimientos, han ido cayendo lecturas y a veces relecturas de -a mi juicio- grandes textos: Doctor Pasavento, Seda, Tokio Blues, El hombre que fue Jueves, No mires debajo de la cama, A los hombres de buena voluntad, Pequeños equívocos sin importancia, Desde la ciudad nerviosa o Las cosas.
Vale, de acuerdo, también fracasé, así que apunto un par de intentos difíciles: Los reinos de la casualidad y La vida instrucciones de uso.


Vuelvo a la película
Sin poner en duda lo práctico, útil y limpio que resulta el manejo de la tecnología fotográfica digital, tengo el firme propósito de recoger en mi próxima salida de Sebastopol mi cámara réflex analógica y cargarle película b/n y hacer seguramente el gilipollas, ya que hace bien poco que adquirí una cámara digital y estoy muy satisfecho con sus resultados.


Y a la química
De la película se pasa al laboratorio, a los baños de revelador, paro y fijador, al artesanal proceso en las entrañas del cuarto oscuro, lugar donde me pienso encerrar, con intenciones poco reveladoras, y a ver quién tiene los huevos de sacarme de allí.


Terapia musical
Esta vez con dedicatoria expresa al Sr. Neira, Javier. A esta eminencia del periodismo de investigación y decálogo andante de la libertad e imparcialidad le recomiendo vivamente Transformer de Lou Reed, esperando así que emprenda un paseo por el lado más bestia de la vida (como dice Albert Pla). Y si no regresa, pues todos contentos.

6 Comments:

At 16:55, Anonymous Anónimo said...

Totalmente de acuerdo en lo de Neira, si no vuelve nosotros al menos lo agradeceremos, en cambio sus buenos y españolones lectores de lne puede que no...
Importante no confundir (como algún blogger me parez que fizo) a ésti ínclito con Chusín Neira, que aunque tampoco ye hemingway, leese con agrado polo menos.

 
At 17:11, Anonymous Anónimo said...

Ánimo pa esas lecturas.Tienen muy buena pinta. Yo últimamente ando algo floju,aunque hago lo que puedo, cayeron lentamente La conjura de los necios, Brevísima historia del tiempo y El Señor de las moscas..¿leíste el extranjeru de Camus?
Fdo. Suarón el librero

 
At 14:26, Blogger cotoya said...

el eterno regreso a la película también me persigue a mí. pero con la única finalidad de probar las adquisiciones de dos de mis vicios combinados. las cámaras antiguas y el ebay.
tiene su encanto, pero que quieres que te diga en cuanto a resultados prácticos no hay nada que hacer...

gran disco, una extraña canción (Andy's chest) es una de mis favoritas.

 
At 13:42, Blogger Guaje Merucu said...

Anónimo: Chusín al menos parece buena gente. Y se lo curra.

Suarón: todos los que me hablaron de "La conjura de los necios" me dijeron que estaba muy bien.
Por supuesto que la lectura de "El extranjero" cayó, unos cuantos años atrás...

Cotoya: la verdad es que tienes razón con lo de la película.
De "Transformer" sólo añadir:
Enorme. Todas sus canciones.

 
At 02:30, Blogger kikeconk said...

Sospecho quien te ha recomendado la obra de Scott Fitzgerald . . .

Gran novela El Señor de las Moscas, al menos me lo pareció en mi adolescencia.

 
At 09:30, Blogger Guaje Merucu said...

¿Y no percibes idéntico "mensaje cifrado" en El Hombre que fue Jueves?

 

Publicar un comentario

<< Home