23 febrero 2008

Disparition

On noya dans l’alcool un pochard, dans du formol un potard, dans du gas-oil un motard
Georges Perec, El secuestro

En el paseo trazado por largas y amplias avenidas se hallaba nuestro amigo Jerry la última vez que fue visto. Comentaron dicharacheros que caminaba sin reparar un mínimo en el paisaje urbano ni en los árboles alineados cuando sucedió. Sostenía un cigarrillo negro en la izquierda y destacaba en su vestir un abrigo azul oscuro. Llevaba los auriculares pendiendo de las orejas conectado a su reproductor .mp3, que expulsaba la cadencia dulce de la música jazz. A sus zapatos marrones les hubiera venido bien una mano de betún, apuntaron los mismos comentaristas.
Todo esto fue lo que se dijo, estos breves apuntes descriptivos fueron lo único anotado la última vez que fue visto nuestro amigo Jerry.
Alguien habló de una mano rápida y enguantada surgiendo de, no se precisó, qué recoveco. Sin embargo, Jerry, nada certero, nada más.